Viajes (I): Ermita de Santa María de Dulcis

Hola! Hoy os presento un pequeño rincón de la provincia de Huesca: la ermita de Santa María de Dulcis.

La ermita de Santa María de Dulcis pertenece al pequeño pueblo de Buera, localidad situada en la comarca del Somontano de Barbastro, a una distancia de 50 Km. de Huesca. 

Entre las pequeñas localidades de Buera y Huerta de Vero, se encuentra la ermita de Santa María de Dulcis,auténtica joya arquitectónica del siglo XVII, y gran muestra del arte mudéjar aragonés.

Partiendo del pueblo de Buera, llegareis a la ermita a través de un estrecho sendero que ha sido testigo del continuo ir y venir de multitud de peregrinos jacobeos que hacían un alto en el camino. Tras un caminata de unos 20 minutos, llegareis a una pequeña explanada donde, oculta entre centenarios olivos y esbeltos pinos, se alza una sobria ermita de austeros muros, guardianes de un auténtico tesoro mudéjar para todos los amantes del arte.

Muro este de la ermita de Santa María de Dulcis

La ermita de Santa María de Dulcis data del año 1610, y está construida sobre un antiguo templo románico. El recinto era un importante centro espiritual que dependía de la próxima Colegiata de Alquézar, y un punto de descanso para viajeros y peregrinos. Constaba de la ermita dedicada a Santa María de Dulcis, la casa donde vivían los monjes encargados de su cuidado, y una pequeña hospedería con cuadras; sin embargo, actualmente sólo queda en pie la ermita, aunque podemos llegar a intuir la importancia del lugar al contemplar los grandes arcos de la antigua hospedería, que se resisten a caer en el olvido:

Restos que nos hacen imaginar la importancia del lugar, como punto de parada de los viajeros

Pero es en el interior, donde el lugar más sorprenderá al viajero con sus yeserías mudéjares. La vista se pierde entre entramados geométricos imposibles, para terminar fijándose en la bóveda, el auténtico corazón de la ermita:

Detalle de la bóveda central, los muros y las columnas, y su rica decoración de yeserías

Bóveda central

Y es que hasta allá donde alcanza la vista, las yeserías mudéjares invaden cada rincón:

Las yeserías mudéjares de la bóveda central representan estrellas, imitando el cielo

Como curiosidades os puedo contar que la virgen de la ermita recibe su nombre por su primera aparición, sobre un panal de miel; que su construcción fue posible gracias al entusiamo que pusieron los habitantes de Buera, especialmente sus mujeres, al ingeniar fuentes de ingresos tan peculiares como la venta de huevos en el mercado de los sábados; o que es tradición acudir al lugar con niños pequeños para, tras un sencillo rito con la cera de las velas, asegurar gracias a la actuación milagrosa de la Virgen que los niños no tengan problemas de habla en el futuro.

Y si después de la visita os ha entrado el hambre, tomar nota: en el cercano pueblo de Huerta de Vero encontrareis el Lagar del Vero, restaurante y hospedería que cuenta con el sello sin gluten:

El Lagar del Vero cuenta con el sello sin gluten, y aparece en la guía de restaurantes aptos editada por la Asociación Celíaca Aragonesa

Un lugar donde podreis degustar comida aragonesa, sin gluten, en un lugar tan típico del Somontano de Barbastro como es un lagar y una bodega, antiguos espacios dedicados exclusivamente a la elaboración del vino y su conservación, hoy día adecuados para grandes comidas familiares:

¡ Buen Provecho ! ... y no olvideis llevaros la cámara de fotos

Detalle del altar de la ermita de Santa María de Dulcis